Nuestras almendras son Too Good To Go. Sí, además de estar riquísimas, no queremos que las tires si ha pasado su fecha de consumo preferente. Por eso sigue leyendo nuestros tips anti desperdicio.
El consumo consciente está en nuestras raíces. Nos preocupamos de nuestra huella en la tierra, en el fruto y en las personas. Por eso, después de enterarnos de la última cifra de desperdicio de alimentos en todo el mundo, sabíamos que teníamos que tomar cartas en el asunto.

Se estima que cada año un tercio de toda la comida producida se tira a la basura, 1.300 millones de toneladas ¡Solo en Europa hablamos de un desperdicio de alimentos equivalente al peso de una pirámide y media! Reducir esta cifra es uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas ¿Por qué es tan importante? Porque disminuir el desperdicio de alimentos reduciría las emisiones de gases de efecto invernadero y la velocidad de la destrucción de la naturaleza que resulta de la conversión de la tierra y la contaminación. Al mismo tiempo, mejoraría la disponibilidad de alimentos y, por lo tanto, reduciría el hambre y ahorraría dinero en un momento de recesión mundial.
Muchas veces pensamos que estas “políticas” no van con nosotros, que es responsabilidad de las grandes empresas. Pero entre todos podemos llevar a cabo acciones sencillas que ayuden al cambio. Aquí entra en acción el reto #MiraHuelePrueba de Too Good To Go que te anima a confiar en tus sentidos.
Es muy fácil, antes de tirar un alimento a la basura ¡utiliza tus sentidos! El test #MiraHuelePrueba te ayudará a evaluar los alimentos pasados de fecha de consumo preferente y evitar desperdiciarlos si todavía siguen en buen estado.
Si eres chirlatero habitual sabrás que es muy difícil que te toque una almendra “mala”, porque nos aseguramos que solo te lleguen las mejores almendras de nuestra cosecha a través de un proceso de selección y calibrado manual. Vaya, ¡las escogemos una a una para ti! Pero no se puede distinguir una almendra “mala” a simple vista. La descubrirás por su sabor amargo y su olor rancio. Mejor te lo explica Paco en esta cata a ciegas:
La almendra es un alimento muy agradecido porque, conservada en buenas condiciones, puedes comértela hasta 2 dos años después de la cosecha, aunque su consumo preferente sea 12 meses después de ser cosechada. ¿Cuál es la mejor forma de conservarlas? Muy lógica… puesto que es un fruto seco debes evitar que esté en contacto con la humedad o o frutas y verduras. Si la mantienes en un lugar fresco, entre 6º y 10ºC, estará riquísima te la comas cuando te la comas.
¿Qué pasa con el resto de productos 100% almendra? Cuando más procesada esté la almendra, como en leche, harina o crema, más sensible es a enranciarse o sufrir el ataque de insectos y pequeños microorganismos. ¡No entres en pánico! Si has abierto el envase, guárdalo en un recipiente hermético lejos de la luz y fuentes de calor.
En tu pedido Chirlata te llegará siempre una hoja de conservación para que guardes el producto de la forma óptima. También lo encontrarás en la etiqueta de los envases junto a la fecha de consumo preferente. Ahora bien, ponle sentido a las fechas y antes de tirarlo #MiraHuelePrueba.
Comparte con nosotros tu cata de productos Chirlata y ayuda a otros #wastewarriors ¡#JuntosContraElDesperdicioDeAlimentos!